"Huesitos", el último de los cinco tigres siberianos nacidos el pasado martes en el Circo Wonderland durante su estancia en Gijón ha muerto hoy en la clínica veterinaria que le estaba suministrando cuidados intensivos.
La muerte se produjo a primera hora de esta mañana por deshidratación al no tolerar la leche maternizada de gato con la que se le estaba alimentando, lo que le provoco diarreas, a pesar de que en las ultimas horas fue alimentado por sondas, según han informado a EFE fuentes de la clínica veterinaria donde fue atendido.
"Huesitos" era el único de los cinco cachorros de la especie protegida "Panthera Tigris Atica", conocida como tigre siberiano, que hasta hoy se mantenía con vida de los cinco que parió el pasado martes una de las tigresas del Circo Wonderland, instalado desde hace tres semanas en Gijón.
Los veterinarios confiaban en las posibilidades de que el último cachorro pudiera desarrollarse puesto que los primeros días se alimentaba "bastante bien", había ganado algo de peso y estaba vital e inquieto. Ninguno de los cinco cachorros fue alimentado por su madre y esa circunstancia, que disminuye las defensas naturales, sumada a la no adaptación a la leche maternizada de gato se considera la causa más probables de la muerte de todos los ejemplares.
El Circo Wonderland es el más antiguo en activo en España, donde se ha asentado hace cuatro décadas, y ha participado en el rodaje de la película "Balada Triste de trompeta", del director Alex de la Iglesia, que narra algunos aspectos de la vida circense en los años de la postguerra.
Los tigres siberianos son una subespecie también conocida como tigre de Amur, que habita los bosques de hoja perenne del extremo sureste de Rusia, aunque a principios del siglo pasado su población se extendía hasta China, Mongolia, Manchuria y Corea.
La población de estos ejemplares ha estado en riesgo de extinción a principios de la década de los años 90 del siglo pasado coincidiendo con la caída de la Unión Soviética, pero un programa proteccionista ha permitido aumentarla paulatinamente.
En la reserva de Sijote Alin, epicentro del programa de recuperación de los tigres de Siberia, se estima en medio millar la cantidad de ejemplares tras superar la cifra critica de 250 en el año 1992 y llegar a 350 en 2004, cuando se realizó uno de los últimos censos.
Fuente: Animanaturalis.org
jueves, 23 de junio de 2011
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