Las pieles están, por desgracia, de moda. Y un ejemplo de ello es la pasarela Cibeles donde diseñadores utilizan pieles para sus nuevas 'creaciones'.
Algunos de ellos son los diseñadores Lemoniez o Roberto Torretta y los los peleteros Miguel Marinero y Jesús Lorenzo, los cual para sus diseños no duda en utilizar pieles de animalesn que habrán estado toda su vida en jaulas sin apenas poder moverse y después torturados hasta la muerte para finalmente formar parte de un vestido, eso sí desfilará, o su piel, por la pasarela vistiendo a modelos.
En cambio otros diseñadores, como Devota&Lomba utiliza pieles sintéticas que no difieren en nada a las naturales, bueno sí, en una cosa, que detrás de ellas no ha habido dolor, tortura ni muerte.
Hay, por tanto, la opción de llevar pieles sintéticas, si es que se desea reproducir la piel de otro animal sobre la nuestra...
Ya no estamos en época de las cavernas y hay otras muchas posibilidades antes que vestir pieles naturales, pero parece ser que quien lleva pieles sobre su cuerpo tiene un prestigio social sobre quien no lo lleva. Pero creo que es todo lo contrario, quien las utiliza esta demostrando su falta de sensibilidad y de etica respecto al resto de los animales. No les importa la vida de los demás, solo intenta aparentar su hipotético rango social, pero lo que sí demuestra es su etica, su falta de etica en esta caso.
Por desgracia esta tendencia no solo esta en las pasarelas, sino que en las tiendas cada vez hay más pieles (ya sea de vaca, de conejo, de visón, de zorro, de borrego, de oveja, de serpiente, etc.). En centros como El corte inglés, Cortefiel, Zara, H&M, Benetton, etc. entre otros muchos, hay muchas pieles de animales que también les gustaba esa piel.
No sé donde ni acabará mi vida, pero espero que no se utilice ninguna parte de mi cuerpo para utilizarlo como espectaculo porque mi piel solo me pertenece a mí.
miércoles, 24 de febrero de 2010
pieles en Cibeles
sábado, 13 de febrero de 2010
Cazalilla (Jaen) o como tirar una pava desde un campanario
Cuando nos acercamos a Cazalilla (Jaén) nunca pensé que vería aquel hecho.
Después de todo lo que he visto no espero ningún acto bueno de los humanos con respecto al resto de animales, pero de aquello, aunque no ha sido lo más horrible o desagradable que he vivido, aun no encuentro las razones para hacer esto a un animal.
En este pueblo tienen la costumbre de lanzar desde un campanario a una pava.
Considero que hay una gran crueldad en este acto, donde centenares de humanos se aprovechan de una pobre animal, cuyo único delito ha sido nacer en ese pueblo de violentos que aman la tortura y el sadismo.
Y como estos no tienen otra forma de diversión que el maltrato animal, un individuo con la cara oculta (cosa que ya explica y aclara muchas cosas) se sube a un campanario con una pava en sus manos y para que la multitud del pueblo se exalte la lanza al aire para ver como con miedo, pánico y todos en su contra, el animal, con las patas atadas, intenta salvar su vida, cosa que provoca la diversión de los pueblerinos
Puede que no parezca que el acto sea de un gran maltrato, pero detrás de este suceso hay un gran significado. La enseñanza que se da actuando de esta manera es que ante un animal-no humano todo vale, porque no se le considera más que un objecto que sirve para divertirse aunque sea maltratándole, torturándole o asesinándole. De igual lo que se haga con él porque no habrá ningun delito de por medio. Todo lo contrario, la gente se divertirá, te aplaudirá y te lo agradecerá. Pero el pobre animal, al que nadie ha preguntado, tendrá sufrirá las consecuencias de actos vándalicos como éste.
Después del lanzamiento, y aun con el público en la plaza bebiendo, riendo y aplaudiendo me intenté acercar al pobre animal, aunque Leo me miró un poco extrañado de esta valentía mía tan inhabitual. Entre las piernas de la gente lo vi, me intenté acercar, le miré los ojos, ella creo que también me miró, pero cuando estaba a un metro de ella unas manos la cogieron y la levantaron con gran violencia. El hombre la levantó por encima de su cabeza mostrándola como si fuera un trofeo. Y mientras la pava atemorizada por todo aquel ruido que la rodeaba estaba aturdida y paralizada por el miedo. Poco más pude hacer que irme del centro de la plaza, el siguiente podría ser yo.
Ya de lejos vi como él mismo hombre se la llevaba metida en un saco.
Di media vuelta, quería irme de aquel pueblo, otro más, con la misma costumbre de abusar del resto de animales. Leo se quedó mirando al hombre que llevaba el animal, tal vez con la esperanza de que la dejara salir en cualquier momento y la dejara libre. Yo lo dudo, aunque no dije nada.
La muerte y la vida
Hace unos días estábamos Leo y yo a las afueras de una ciudad, era monte y se notaba que el aire era más puro. Hacía sol, notábamos la brisa que movía las hojas de los árboles y se escuchaban el canto de las pájaros, y sin darnos cuenta nos fuimos adentrando por el bosque.
Mientras caminábamos sentímos un ruido en un pequeño agujero que había en el suelo. Nuestra curiosidad felina nos obligó a meter la pata para ver que había allí dentro. Casi sin darnos cuenta un jabalí aparecío detrás de un arbusto y se lanzó con furía sobre nosotros. Gracias a nuestra agilidad pudimos esquivarlos y salir corriendo. Pero el jabalí no tenía suficiente y se lanzó a nuestra caza. Con fortuna pudimos subirnos a un árbol y contemplarlo desde la altura. Estuvo unos segundos mirándonos desde abajo con desesperación. Al rato se tranquilizó dio media vuelta y se fue.
Vimos como se acercó al agujero y como de él aparecieron unos jabalies diminutos. Mientras iban saliendo la madre, intuyo que era ella, les ponía delante alguna cosa para comer.
De repente un gran estruendo hizo desaparecer la tranquilidad del bosque. Centenares de pájaros sobrevolaron nuestras cabezas...
...Leo se subió por la ramas ocultándose en la copa. Estaba muy asustado.
Cuando el eco del ruido fue apaciguándose miré a mi alrededor por si veía algo fuera de lo normal. Pero no, todo parecía estar en su sitio. Dirigí mi mirada hacía el jabalí. Y allí estaba...tumbado en el suelo, con un charco de sangre alrededor suyo. Tenía un agujero en medio de la cabeza. Ya no se movía. Una de sus crías, que debían estar muy asustadas, osó a sacer el hocico por el agujero, olisqueó y sacó todo el cuerpo. Se acercó al cuerpo de su madre. Y allí se quedó hasta que unos pasos se oyeron muy cerca y se volvío a meter de nuevo en el agujero.
Un par de humanos, con escopeta en mano, se acercaron al cádaver del jabalí, se miraron extrañados y se fueron casi corriendo de allí sin mirar atrás: Ves como era una hembra, le dijo uno al otro.
Otra vida había sido arrancada a la fuerza.
Y allí restó el cádaver de una madre envuelta por la tristeza de todos los jabatos.
Al día siguiente en los diarios aparecía la notícia que el gobierno había abierto el periodo de caza del jabalí para controlar el número de individuos. Esas crías perdieron a su madre porque a una persona sentada en un despachó se le ocurrió que habían demasiados jabalíes en el monte. Y lo más fácil es matarlos. Y como el acto de matar está impregnado en la naturaleza humana no faltan candidatos para hacerlo.
De nuevo la cabeza pensante del ser humano, junto con su egocentrismo y soberbia, vuelve a sembrar el mundo de cadáveres y sufrimiento.
Los humanos primeron se adueñan de tu espacio, te discriminan y te obligar a otro sitio, cuando vuelven a necesitar más espacio te vuelven a acorralar y, como ya no queda más sitio para los dos, simplemente acaban con el resto de animales.
Qué inutilidad!!
viernes, 5 de febrero de 2010
Por qué se controlan las especies?
Entre los animales humanos y no humanos nos diferencian muchas cosas, y una de ellas es el deseo de poder y de conquista que tienen algunos humanos.
Nosotros tenemos el deseo de imponer nuestra voluntad por simple supervivencia. Todo lo contrario que algunos humanos. Se quieren imponer en su trabajo, en su pais...en el mundo... para que el resto de la gente les considere alguien importante y con mucho prestigio, algo que, por cierto, suele sobrevalorarse muy rápidamente.
Una consecuencia del afan humano por dominar todo lo que le rodea lo sufrimos el resto de animales, y no solo los individuos en particular sino las especies en general.
Los gatos tenemos, en cierta parte, fortuna por no ser considerados un producto de consumo humanos, si exceptuamos en algunos paises, y gracias a ellos no nos sentimos en peligro de extinción. Aunque hay que aclarar que los individuos sufrimos por nuestro propio dolor o por los que se encuentran cerca de nosotros y nunca por una especie. Nosotros no solemos ser conscientes de si nuestra especie está en peligro o no, eso se lo dejamos a los humanos que lo quieren controlar todo y tienen un pensamiento más abstracto.
Pero, me guste o no, los humanos deciden por las especies, y cuando se habla de especies habría que particularizar, se habla de cientos de miles o millones de individuos que van a sufrir y a morir...
Por ejemplo, hoy en día se está discutiendo si hay que parar la sobrepesca que sufre el atún en el mar Mediterraneo, pero no por cuestiones éticas (cada día dudo más que esto sea una caracteristica humana) sino porque en caso de seguir así el atún desaparecerá y eso será una catastrofe para las personas que se alimentan de ellos. Pero cuando yo leo esto no pienso en ese 'mal', sino en lo que hay de fondo. Detrás del ese problema hay millones de individuos que quieren seguir viviendo, nadando en el mar, ver cada día la luz del sol, que nadie decida sobre su futuro.
Pero las cosas no son así, algunos paises estàn a favor de vetar la pesca, otros en cambio no, otros que sí pero dentro de unos meses...Todas están personas no quieren más que demostrar su poderío y que sus ideas son las mejores. Pero la razón principal de sus opiniones son económicas, porque toda esta gente solo se mueve por el dinero, tal vez en forma de fama, en forma de votos, de prestigio..., pero al final todo esto lo miden en cantidad de dinero. Ahora todo se mide en dinero.
Evidentemente no piensan en los atunes, para ellos es solo otro producto de consumo humano que hay que cuidar para que no se pierda para siempre, o sea, que no se acabe un negocio que mueve millones de euros/dólares/yenes en todo el mundo. Y por eso se controlan tanto el número de individuos de la mayoría de especies, no vaya a ser que se pierda un gran mercado económico.
Y mientras ellos discuten, hay un atún que ahora está naciendo, está sintiendo el frio del agua, ve por primera vez la luz del sol, y se lanza hacía las profundidades del agua..., que si no se para la pesca, dentro de unos días morirá asfixiado o aplastado al ser cogido, entre otros miles de peces, por una red. Una red que será promovida por los gestores de los paises, y apoyada por todos aquellos que seguirán comiendo el atún.
Después será subido a un barco, tal vez con vida intentando seguir respirando (cuantas veces he visto en la tele esas imagenes de un pez dando botes en un barco mientras se está asfixiando).
Y ése es solo un individuo que no formará nunca de una estadistica ya que los peces no se cuentan, ahora se pesan en toneladas. Millones de vidas que forman parte de toneladas! El valor de la vida de los peces es demasiado bajo para medirse. A partir de una tonelada empiezan a valer algo.
Confieso que alguna vez comí una lata de atún, pero hasta ahora no entendí que aquello había sido un animal libre en medio del océano que había sido asesinado para mi placer. Ahora ya no!!